“El dinero como efector del ecosistema humano” La gran paradoja antrópica entre economía y política y/o gobernanza por Emilio Muñoz

Reflexiones personales de Emilio Muñoz como Director técnico de la Unidad de Emprendimiento Social, Ética y Valores en la Ingeniería (UESEVI) de la E.T.S.I de Minas y Energía de la Universidad Politécnica de Madrid.

El artículo ha sido publicado previamente en la Web de la UESEVI.

Por Emilio Muñoz

Reflexiones personales de Emilio Muñoz, Director Técnico de la UESEVI. Otoño de 2022

Estamos ante la gran paradoja antrópica [1] del neoliberalismo. La política en tanto que ejercicio del gobierno o gobernanza vira hacia la derecha extrema mientras la economía presionada por la realidad compleja y tremenda en sus efectos gira hacia la izquierda o sea teniendo en cuenta la necesidad de limitar el crecimiento y apoyar la corrección de las desigualdades.

 

Contexto analítico

El concepto de Entorno de Sociabilidad o entorno NACE (Naturaleza (Ambiente + seres vivos)-Cultura – Ética) surge de la exploración de la evolución sobre la especie humana, aunque paradójicamente la incorporación de la ética tuvo su apoyo para seleccionar valores en el comportamiento animal con un libro seminal como Justicia Salvaje: la vida moral de los animales que permitió aplicar valores, dentro de las éticas aplicadas, a una ética consecuencialista (interéticas) [en video: [2]; en texto: [3]]

 

Explorar el primer elemento del trinomio NACE (Naturaleza)

Sin embargo, ante la intensidad de la emergencia ambiental o pandemia ambiental [4][5] y [6] pensamos que era necesario explorar bajo una perspectiva del análisis comparado como habíamos hecho hasta ahora muy coyunturalmente y de modo especial con el reino vegetal [7] para realizar una modesta reflexión o investigación sobre el primer elemento del entorno NACE, específicamente de carácter antropológico sobre el mundo rural y el de la ganadería en particular. Una primera y sorprendente conclusión ha permitido identificar que, para el estro de las hembras de los mamíferos, que no existe en humanos ni primates, son factores necesarios unas condiciones ambientales satisfactorias tanto en términos de alimentación como de salud ambiental (fecundidad y calidad, por ejemplo, el caso de las vacas felices o de las cerdas o jabalíes cuyas camadas varían en número: -de modo notable- en función de estos parámetros). Este modesto trabajo no tiene otro mérito que sobreponer, ante el impulso emocional, la reflexión moderada, aplicando lo que hemos llamado metodología darwiniana, observar, acumular y concluir: la relación positiva entre seres vivos y sus ambientes mejoran las condiciones de vida.

 

La complejidad de la vida humana en el primer tercio del siglo XXI

En las complejas condiciones de vida de las sociedades modernas es cada vez más evidente que la desigualdad económica, resultado terrible de una globalización extractiva inspirada en una visión neoliberal de la economía con el dinero como único valor y en buscar la adicción al consumismo (adoración al dios mercado), es uno de los más lacerantes problemas socioeconómicos y políticos actuales [8] y [9].

El efecto de cuarenta años, por mucho que se disfrace, no del fin de la historia y el último hombre como profetizó Francis Fukuyama [10], es aumentar  la riqueza de los más ricos y la pobreza de los pobres, no solo en profundidad sino en extensión (El 1% de la humanidad acumula la riqueza del 99% restante, e incluso el 10% del citado uno por ciento, es la que acumula las mayores diferencias, en  patrimonio y poder).

En nuestro grupo de trabajo y en la AEAC venimos analizando interdisciplinar y multidisciplinariamente las quiebras de la economía política y práctica. En un reciente análisis sobre las apropiaciones inadecuadas de índices para establecer diagnósticos destinados al marketing o a otros tipos de publicidad engañosa, el dinero emerge como factor decisivo en el primer nivel en términos de jerarquía ecosistémica [11].

Todos los acontecimientos del primer cuarto de siglo XXI están repercutiendo de modo decisivo en la incertidumbre y el miedo, amén de en las pérdidas de salud en sentido amplio con daños irreversibles a la naturaleza y profundamente dañinos para la mayoría de seres humanos y de modo bastante específico sobre las mujeres. Es verdad que la especie humana ha evolucionado tropezando repetidamente en la misma piedra, pero con tanta insistencia parece llegar al límite para su supervivencia. La mayoría de los debates siguen teniendo al dinero como protagonista (precios, impuestos, armas para la guerra).

 

Una gran paradoja antrópica

El giro de la economía hacia un paradigma social desde los organismos internacionales [Banco Mundial, OCDE hasta los bancos (Informe Anual de la Fundación la Caixa en su obra social de 2021 que se titula “ Solo es progreso si es de todos” como ejemplo)] marca un nuevo paradigma: parecen reconocer que el crecimiento no puede ser el único objetivo a alcanzar. Es tarea difícil porque aún hay personajes recalcitrantes en nuestro país, España, que a finales de septiembre sean capaces de renegar del debate entre pobres y ricos, señalando que hay que dejarlo de lado [12]. Ante estas declaraciones o en pleno debate acerca una guerra fiscal sobre los impuestos conviene insistir una vez más sobre las enormes grietas abiertas por el neoliberalismo extractivo globalizador durante los últimos treinta y cinco años: el abuso de la riqueza por unos pocos (¿el 0,1% de la población mundial o incluso apenas del mundo desarrollado?), las enormes desigualdades con incrementos preocupantes de la pobreza infantil, el consumismo desenfrenado como pauta habitual de conducta, en una retro conversión de todas y todos hacia la adolescencia perpetua. A eso se añade que el neoliberalismo se ha estado disparando ráfagas de tiro en los pies: la nueva forma de trabajo que supone una reducción del valor de lo humano ante la gran apuesta por la digitalización en lo que podemos calificar de economía productiva; la necesidad de la transformación ecológica que supone revisar el castillo de naipes que se ha construido alrededor de la energía, la emergencia climática que afecta transversalmente todos los sectores de la economía y todas las virtudes, los logros que la modernidad ha permitido alcanzar o mejorar y a las que los conflictos del siglo XXI están poniendo en cuestión o incluso en peligro: salud, alimentación, educación, ocio con su enorme diversidad.

Por lo tanto, ahora se comprende la muy reciente posición de Francis Fukuyama, citado antes, que fue gran gurú de la explosión globalizadora tras la caída del muro de Berlín, por la que reconoce que el PIB no es el único indicador que puede medir los éxitos económicos y que hace falta un Estado fuerte. No es el único que proponga estas necesidades de una nueva economía, pero es el gran converso, junto con la paradoja del Banco Central europeo que dirige la Sra. Lagarde que aboga por el neoliberalismo de los halcones para contener la inflación ,mientras que a la vez reclama apoyos fiscales a los desfavorecidos. Quizás el hecho más dramático de casos de brutal reconversión es el de la primera ministra británica y su propuesta económica estrella de rebaja de impuestos que ha tenido que rectificar en el plazo de una semana por la presión del ¡mercado! y de algunos de sus propios parlamentarios [13].

 

El periodismo responsable nos ofrece el 2 de octubre de 2022 un nuevo dato de importancia para este modesto discurso: Soledad Gallego Díaz en el Punto de Observación del suplemento IDEAS de “El País”, página 9,recoge la preocupación de los grandes negocios norteamericanos que en 1999, ante el evidente fracaso del concepto y sistema de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC), propusieron “que debían ajustar en lo sucesivo sus prácticas comerciales a estándares ambientales de justicia social y de gobernanza (ESG, en inglés) [14]. No quiero ser alarmista, pero encuentro, de nuevo una paradoja, que estos grandes empresarios norteamericanos han reconocido en una conferencia celebrada reunión que al parecer incorporaron muy pronto y con entusiasmo que debían incorporar/ajustar sus prácticas comerciales a dichos estándares y los incluyeron en su publicidad, pero 23 años después han sido incapaces de ponerlos en práctica. Un resumen de los resultados de esa reunión, titulada “Reimaginando el papel de los negocios en la plaza pública”, se ha publicado en Harvard Law Review [15]. Reconocen que ante su incapacidad sean los gobiernos los que regulen y los apliquen porque voluntariamente los han aplicado muy pocos. Parafraseando a Mariano José de Larra [16] diría “Pensar en la modernidad de los empresarios españoles es llorar, con lágrimas de sangre añadiría”. Creo que ni siquiera han incorporado, o conocido, el concepto multifacético que representan las siglas ESG.

Estamos ante la superación del nivel de dilema, para encontrarnos en el seno de una gran paradoja antrópica [17], respecto a lo que ha sido la directriz de la economía en las prácticas políticas del mundo desarrollado y de modo muy especial en Europa.

 

Dos libros: Libro nuevo de José Moisés Martin Carretero: “El futuro de la prosperidad: El nacimiento de una nueva economía”(editorial Ariel , 2022) o revisitar el Informe Anual de la Fundación la Caixa en su obra social de 2021 que se titula “Solo es progreso si es de todos”.

 

ENLACES Y REFERENCIAS:

[1] https://theconversation.com/paradojas-antropicas-y-la-desordenada-vida-en-el-planeta-179485

[2] https://www.youtube.com/watch?v=JHTTBCMn2EI

[3] https://www.tiemposcanallas.com/una-sintesis-de-la-teoria-de-la-evolucion-supervivencia-adaptacion-y-entorno-para-la-sociabilidad-de-emilio-munoz-fundacion-1o-de-mayo/

[4] http://cchs.csic.es/es/article/cambio-climatico-su-complejidad-articulo-jesus-rey-emilio-munoz-ifs-ana-munoz-van-den-eynde

[5] https://theconversation.com/no-es-solo-cambio-climatico-como-comunicar-la-pandemia-ambiental-166314

[6] https://ethic.es/articulistas/emilio-munoz-ruiz/

[7] https://theconversation.com/robles-y-encinas-nos-dan-lecciones-de-cooperacion-para-afrontar-el-cambio-climatico-158928

[8] https://www.nuevatribuna.es/opinion/ramon-hdez-avila/capitalismo-democracia-constitucion/20171207131731146093.html

[9] E. Muñoz, “ La democracia está en crisis , ¿ se ha dado cuenta el capitalismo neoliberal? “, Paradigma, Revista Universitaria de Cultura, número 23, marzo ( A. Diéguez y Francisco Martínez González ,eds.),pp.88-95. https//riuma.uma.es/xmlui/handle/10630/23. Año 2020.]

[10] http://www.librosmaravillosos.com/elfindelahistoriayelultimohombre/pdf/El_Fin_de_la_Historia_y_el_ultimo_hombre-Francis_Fukuyama.pdf

[11] https://aeac.science/articulo/669247/https://aeac.science/articulo/comentario-al-texto-el-ranking-de-munchhausen-por-santiago-lopez/

[12] https://www.huffingtonpost.es/entry/rajoy-resucitar-el-debate-ricos-pobres-es-muy-peligroso_es_6336ee4fe4b0e376dbf647d

[13] https://elpais.com/economia/2022-10-03/la-primera-ministra-britanica-da-marcha-atras-en-la-rebaja-de-impuestos-para-salvar-su-gobierno.html.

[14] https://elpais.com/ideas/2022-10-02/lo-dicen-grandes-empresarios.html

[15] https://www.harvardmagazine.com/2022/09/a-harvard-conference-on-the-battle-over-esg-investing

[16] https://www.elcorreogallego.es/opinion/editoriales/investigar-en-espana-es-llorar-XK6518123

[17] https://ethic.es/2022/04/una-paradoja-antropica-la-contradiccion-entre-la-mejora-de-la-vida-y-la-crisis-ambiental/

Autor

Emilio Muñoz es Profesor de investigación emérito en el Departamento de Ciencia, Tecnología y Sociedad del Instituto de Filosofía (IFS) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Es socio promotor de la Asociación Española para el Avance de la Ciencia (AEAC) y Presidente de su Consejo Consultivo.

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